“Levántate y anda.” Mt 9, 1-8

Es muy lindo el Evangelio de hoy porque nos lleva a agradecer por aquellos que hacen todo lo posible para que nos recuperemos. Dice que Jesús al ver la fe de los que llevaban al paralítico ante Él, le perdona los pecados.

Los maestros de la ley nuevamente lo tratan de blasfemo, pero Él con la autoridad que le ha dado el Padre, le pide que se levante, tome su camilla y se vaya a su casa. Los maestros no admiten que Él se considere Hijo de Dios, que cure no sólo el cuerpo sino el alma, que haga caminar a los que ellos han tenido paralizados por años.

Pidámosle a Jesús que nos de la fuerza para levantarnos, tomar nuestra camilla e irnos a casa.