“Ese hombre es un instrumento elegido por mi”
El tema de hoy, lo hemos escuchado y leído seguramente muchas veces. Se trata de Saulo, un hombre apasionado por las tradiciones de la religión judía, perseguidor de la Iglesia, que se las juega todas por combatir ese nuevo movimiento que ofrece una nueva imagen de Dios. Pues aquí tenemos un relato que se podría titular: “Las sorpresas de la gracia de Dios”. Una historia, que da mucho de sí para orarla – porque también se ora partiendo de la vida de la gente – con el telón de fondo de la escucha, del ecumenismo, de la sinodalidad; pero sobre todo, descubriendo y gustando lo que Dios puede hacer en las personas que se abren a la gracia como Saulo y Ananías…
Con la conversión de Pablo, se abrió el camino de la evangelización de los gentiles, de nosotros a quienes, por distintos caminos, también misteriosos, ha llegado la Buena Noticia de Jesús. Agradezcamos hoy de una manera muy especial, por esa cadena de evangelizadores que han sido los instrumentos para que nos llegue ese regalo tan grande y misterioso, de la fe en el Dios de Jesús.