“Dios con nosotros” Mt. 1, 18-24
Seguimos haciendo camino en este adviento y nos vamos acercando a la fiesta de La Navidad. En ella celebramos el gran misterio de un Dios que se encarna, que se hace uno de nosotros y lo reconocemos como EMANUEL, el Dios con nosotros.
Sin embargo, muchos en nuestro mundo han expulsado a Dios de su vida. encerrándose en sus propias contradicciones y miserias. Si esto es así, entonces ¿quién nos puede decir quiénes somos y qué es lo que realmente queremos? Necesitamos que Dios nazca de nuevo entre nosotros, que brote con luz nueva en nuestras conciencias. Para encontrarnos con ese Dios no hay que ir muy lejos. Basta acercarnos silenciosamente a nosotros mismos. Basta ahondar en nuestros interrogantes y anhelos más profundos. Este es el mensaje de la Navidad: Dios está cerca de cada uno de nosotros, donde tú estás, con tal de que te abras a su Misterio. El Dios inaccesible se ha hecho hombre y su cercanía misteriosa nos envuelve.
En cada uno de nosotros puede nacer Dios. Simplemente, abre tu corazón.